NUBARRONES…

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Nubarrones, eso es lo que hay sobre mi cabeza. Intenta salir el sol, pero no es posible, las nubes negras se ponen delante de él. Hay días que son así, la luz solar quiere hacer su trabajo, dar energía, pero de repente, aparece una nube y zas, todo a paseo.

Nisiquiera las buenas noticias hacen que se espante el nublado, éste puede más. Es mejor meterse en un caparazón o que las hojas del calendario pasen lo más rápido posible, para ver si algo cambia, o el ambiente, se tranquiliza.

Esas nubes hacen que todo se vea con apatía y desgana, sin deseo de solucionar problemas, no encontrando el momento para retomar el camino positivo, haciendo las tareas como un atómata, sin entusiamo y con un gran silencio dominando el entorno. Dan ganas de coger un saco de boxeo, con el objetivo de dar puñetazos y no parar hasta que este mal rollo y agobio se saque fuera.

Los nubarrones siguen ahí, que llueva o que salga el sol, pero que se muevan esas nubes negras a un lado, para ver lo que está delante de nosotros, de forma más nítida, con más claridad.

34 comentarios en “NUBARRONES…

      • allamas2000 dijo:

        Hombre, el mío lo que tiene de positivo es que está basado en una experiencia de frustraciones, pesares y tristezas mucho más numerosa, por aquello de la edad. Es mucho más científico, porque aprovecha la infinita divisibilidad del tiempo para nuestro propio beneficio, y te permite seguir adelante aislando los problemas en pequeños cluster, que puedes almacenar bajo siete llaves, destruir individualmente, o hacer pequeñas montañitas para después pasarles la apisonadora.
        Lo que está claro es que los problemas son componentes inherentes de la vida, como las actuaciones del rival son inherentes a la competición deportiva, y que rendirse no es una opción, por tanto el SMV es una simple cuestión estratégica, una herramienta de competición y autodefensa ante una realidad cambiante, que los días pueden ser malos, pero la existencia no tiene porqué.

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      • La Rubia dijo:

        Estoy de acuerdo en que los problemas forman parte de la vida y ahí estamos, solucionandolos, pero hay días que me niego.Otro día,se abordarán.De nuevo gracias por las palabras,son muy significativas y dicen mucho.Un abrazo

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  1. Poli Impelli dijo:

    Las nubes son necesarias, tanto como la noche para el día. El tema es no aferrarse, darse el gusto y aceptar la oscuridad, para luego saber soltar. Puro aprendizaje. Ánimo, hermosa. La hora más oscura es la más cercana a la amanecer. Siempre.😉

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  2. lafolino dijo:

    Los broncos nubarrones.

    Admito haber vivido equivocada,
    cruzando las fronteras del destierro
    con una camiseta imaginaria.

    Procuro crear cauce en anaqueles
    colmados de estaciones y de Biblias,
    tensando morbidez y desaliento.

    Admito presidir tu dormitorio
    vestida con piyama de sedas naturales
    y andar por la escalera con pantuflas.

    Procuro ser la párvula inocente
    que construye epigramas.
    En su próxima vida serán gestos.

    Admito que procuro no soñar
    los instantes del flash
    en que piden perdón, tus ojos sin respuesta.

    Procuro no perderte pero admito
    que la lluvia sonámbula de hoy
    es como un torbellino inexpugnable.

    No puedo persuadir al aguacero
    que nuestra avellaneda está asolada,
    enferma de humedad,

    adolecida de ángeles y estrellas,
    de tanto andar hurgando por tu sombra,
    a la intemperie,

    bajo oscuros y broncos nubarrones.

    Tus nubarrones me recordaron los míos. Este texto forma parte del poemario inédito Cruzamientos y Aspavientos.

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