NUESTRA…

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Sigo pensando que cada relación es un mundo, que es especial, diferente de todo, sea relación de amistad, de amor, entre padres o hermanos. Ninguna relación es comparable a otra porque la normalidad de las mismas depende de las personas integrantes.

Supongo que cuando eres más joven, los modelos sociales al uso, prefieren un tipo de relaciones a otras, con unas características determinadas, basadas en una comunicación de sentimientos «normal». La realidad es otra, a menos a mi parecer, porque cada familia tiene sus reglas de comunicación, su expresión emocional. Cada pareja tiene unos roles, unas pautas de conducta y dentro de los amigos, esa amistad se traduce de distintas formas.

Puede que existan patrones comunes porque cuando algo ocurre, sea del signo que sea, te vuelcas en ellos, en ayudarles, en apoyarles, en estar ahí para lo que sea. Porque es tu familia, porque es tu pareja o porque son tus amigos. Puedes querrerles, odiarles, hartarte de algo que dicen o hacen, seguirles hasta el fin del mundo,…pero tu cabeza, tus dos hemisferios, el emocional y el racional, te transmiten que es «eso».

«Eso», que no tiene nombre, categoría o descripción, es lo que hace que tú y ellos, mantengáis esa relación. Una relación que puede cambiar con el tiempo, donde nos adaptamos mutuamente, dependiendo de nuestro estado de ánimo, de nuestro tiempo disponible. Nuestra relación, sin comparaciones, ni mejor ni peor, es la nuestra.